Descubriendo la Dominante Secundaria: ¿Cómo Funciona?

La dominante secundaria es un recurso musical utilizado para crear tensión en una progresión armónica. Se define como el acorde de un grado determinado que se reemplaza temporalmente por el acorde de dominante del grado anterior.

En otras palabras, la dominante secundaria es un acorde que se toma prestado del grado que lo precede y tiene una función casi idéntica a la dominante del grado que le sigue. Por ejemplo, en una progresión armónica en la tonalidad de Do mayor, la dominante secundaria de la tercera nota (mi) sería el acorde de Sol mayor, que es la dominante del acorde de Do mayor (la tercera nota).

La dominante secundaria se utiliza a menudo en la música popular para crear un efecto de sorpresa en la progresión armónica. Por ejemplo, en la canción "Yesterday" de The Beatles, el acorde de Re menor (vi) se convierte temporalmente en un acorde de Si7 (V7/V), lo que crea un momento de tensión en la progresión y hace que el oyente preste más atención.

Es importante tener en cuenta que la dominante secundaria no puede ser utilizada de manera arbitraria. Debe ser utilizada en el contexto adecuado y en una progresión armónica que tenga sentido. Además, también es importante asegurarse de utilizar los acordes de forma coherente y que estén en armonía entre sí.

En resumen, descubrir la dominante secundaria es una herramienta esencial para cualquier músico que quiera enriquecer sus progresiones armónicas y crear una experiencia de escucha más emocionante. Aprender a utilizar la dominante secundaria de manera efectiva es una habilidad que puede marcar la diferencia entre una canción aburrida y una canción emocionante y memorable.

¿Cómo se cifra la dominante secundaria?

La dominante secundaria es un acorde de función armónica que se crea a partir de un acorde distinto a la dominante, que se convierte en el acorde de quinta de la dominante y se utiliza en la armonía para crear tensión y resolverla en la tónica. El cifrado de la dominante secundaria se realiza en el contexto de la tonalidad en la que se está tocando la pieza musical.

Una manera común de cifrar la dominante secundaria es utilizando el símbolo de la dominante (V) seguido de la cifra del acorde al que se ha añadido la quinta disminuida. Por ejemplo, si en la tonalidad de Do Mayor se quiere cifrar la dominante secundaria de la subdominante, se escribiría como V7b5/IV, siendo el acorde de la subdominante (IV), el acorde al que se le ha añadido la quinta disminuida.

En algunas ocasiones, cuando se utiliza la dominante secundaria como preparación para la resolución de una modulación, se puede cifrar con una barra diagonal (/) seguida del acorde de la tonalidad que se quiere modula

Es importante tener en cuenta que la utilización de la dominante secundaria debe ser coherente con la armonía de la pieza y se debe evitar su uso excesivo para no restarle significado y efectividad a su función armónica. El cifrado adecuado de la dominante secundaria ayuda a los músicos a entender la estructura armónica de la pieza y a encontrar más fácilmente las resoluciones y modulaciones que se producen a lo largo de la misma.

¿Cómo identificar el dominante?

El dominante es una persona que se caracteriza por ser segura, enérgica y positiva en todo momento. Identificar a un dominante puede ser muy útil en diversas situaciones, como en el ámbito laboral, familiar o social, ya que éste puede llegar a tener un gran impacto en la dinámica del grupo. A continuación, te presentamos algunas formas de identificar a un dominante:

  • Observa su lenguaje corporal: los dominantes suelen tener una postura erguida y una expresión facial confiada. Su mirada es firme y directa y su voz suele ser clara y potente. Además, tienden a moverse con decisión y a ocupar un espacio mayor que el resto de la gente.
  • Presta atención a sus interacciones sociales: los dominantes se destacan en las conversaciones grupales, ya que suelen tomar el control y liderar las discusiones. Además, suelen ser muy persuasivos y convencer a los demás de sus ideas con facilidad. También pueden llegar a ser un poco arrogantes y egocéntricos al defender su punto de vista.
  • Analiza su conducta en situaciones estresantes: los dominantes suelen ser muy resolutivos en momentos de crisis, tomando decisiones rápidas y efectivas. Además, suelen mantener la calma en situaciones de alta presión y transmitir seguridad a los demás. Sin embargo, también pueden ser impacientes y frustrarse con facilidad ante la falta de progreso.

En resumen, identificar a un dominante puede ser muy útil para entender su comportamiento y su impacto en los demás. Si bien los dominantes pueden ser muy beneficiosos para los grupos al liderarlos y motivarlos, también pueden llegar a ser un poco abrumadores y arrogantes en ocasiones. Por lo tanto, es importante saber cómo interactuar con ellos de manera efectiva y equilibrada.

¿Qué son las dominantes auxiliares?

Las dominantes auxiliares son acordes que se utilizan en la armonía de la música. Son acordes de séptima que se usan como dominantes sustitutos para generar tensión y resolver en la tónica de manera más efectiva.

Estos acordes ofrecen diferentes posibilidades de armonía a la música, lo que les permite a los compositores darle un toque más interesante a sus composiciones. Las dominantes auxiliares también son conocidas como acordes sustitutos o acordes de sustitución.

Una de las ventajas de utilizar la dominante auxiliar es que permite unirse a la melodía de una manera más fluida y coherente. Además, estos acordes permiten que los músicos puedan improvisar y experimentar con diferentes variaciones armónicas.

Dentro de la teoría musical, las dominantes auxiliares se clasifican por su relación con el acorde que sustituyen. Por ejemplo, la dominante auxiliar II7 se usa para sustituir la V7, mientras que la V7 se puede sustituir por la dominante auxiliar tritónica.

En resumen, las dominantes auxiliares son acordes que ofrecen diferentes posibilidades de armonía en la música. Su uso permite una unión más fluida y coherente con la melodía, además de permitir a los músicos improvisar y experimentar con diferentes variaciones armónicas. Son un elemento clave en la teoría musical y es importante comprender su funcionamiento para poder aplicarlos en la música adecuadamente.